Acabo de terminar ayer (lo cual indica un nuevo comienzo) un extraordinario programa llamado Shine Inside de la mano de Reborn, José Casas y José Arce donde por medio de tareas puntuales tanto del espíritu como de la 3D fui transitando por los caminos heroicos de mi psique.
En estos términos sin duda Joseph Campbell es quien más ha abordado las características del arquetipo del héroe, su travesía y aspectos psíquicos.
En sus planteamientos los héroes también saben recibir ayuda. Todo parte de tener un propósito, un qué y un para qué; y fue así que apelando a las sincronías (que me encantan) y a mensajes muy puntuales de hacia dónde moverme, comencé este extraordinario programa y así mi propia travesía heroica. Como comentaba al principio ayer terminó el programa, dos meses de trabajo que llegó a niveles de profundidad que no me habría imaginado. Sigo integrando información y re armándome luego de todo lo revelado y experimentado, y sé que no veo la vida desde el mismo lugar. Definitivamente además del trabajo interno algo básico en el proceso ha sido contar con el apoyo que de manera impecable aportaron tanto los facilitadores como todo el equipo (Gaby y Chiemi) y el grupo completo lleno de mujeres y hombres dispuest@s a ir más allá de sus limitaciones y a quienes admiro profundamente.
Y justo entre la nostalgia y la alegría del momento de cierre pensaba en La Historia Interminable, una de mis lecturas de cajón y referencia para los procesos humanos. Y recordé a Atreyu, este héroe que en su paso por Fantasía y con un objetivo claro, transita por una serie de situaciones que lo ponen en peligro y también por encuentros que le ayudan a expandir su consciencia y entendimiento como cuando se encuentra con Gmork y la tristeza y desolación de la Nada o cuando se topa con la gran sabia Vetusta Morla que lo acompaña en el proceso de re acomodar sus ideas y conceptos.
Y es pasando estos más otros encuentros y luego de haber perdido a Fújur, su ancla en forma de dragón, que llega herido y casi inconsciente con la pareja de gnomos Enguivuck y Urgl, quienes lo cuidan y están a su lado hasta que va sanando.
Enguivuck es un científico fascinado por los secretos del Oráculo, Urgl una poseedora de los secretos y usos de las hierbas y justo es con sus pócimas a base de plantas (sagradas) que sana a Atreyu. Cuando lo está curando le dice una frase que siempre me ha resonado mucho, y más cuando acompaño o experimento situaciones de complejas: "Tiene que doler para curarse. Si no te doliera, tendrías el brazo muerto."
Y es que en esta experiencia humana sí es a veces por medio del dolor, de la pérdida etc que logramos contactar con la vida... por paradójico que suene. La esperanza es que nada es para siempre y que en nuestras propias travesías heroicas, y pasando por todos los recovecos de nuestros cuerpos espiritual, físico, mental y emocional, puede que salgamos fortalecid@s con una consciencia más plena del poder de nuestra esencia.
Pero todo ésto no sería posible sin la contención de nuestros “Enguivuck y Urgl” (en este caso ha sido Shine Inside) que representan nuestras redes de apoyo.
Las pérdidas y los procesos de dolor son parte de nuestra vida, pero las redes amorosas que nos acompañan y nuestra esencia nos ayudan a fortalecer el espíritu hasta que logremos nuevamente el equilibrio.
Gracias gracias gracias querid@s José’s, Gaby, Chiemi, gracias al gran equipo formado por Pepe Ramos, Irán, Gianni e Ivan que hicieron una magia muy poderosa, gracias a las heroínas y héroes con quienes tuve el honor de coincidir en esta gran aventura de hermandad, a mi querido AC, y gracias a la vida por seguirme mostrando estos caminos de apertura tanto para mí como para el servicio que ofrendo con tanto amor.
Para conocer más sobre éste y otros programas visita https://feelreborn.
María Eugenia Márquez León
Psicoterapeuta Humanista y Transpersonal
@artavaviviendoenplenitud
https://www.youtube.com/channel/UC0iEh2SlHdHvciAB7pG8P3A